20 de marzo de 2009

"Cómo ahorrar ante la crisis"


Ante esta crisis, nuestra casa puede ser una fuente importante de ahorro para la familia en el uso adecuado de servicios como luz, agua y gas. Emplear inodoros de seis litros, calentadores solares de agua y focos ahorradores, no sólo ayudan al ambiente sino al bolsillo familiar. Aunque muchos de los gastos que se realizan en la vivienda son palpables o concientes como la compra alimentos, ropa, transporte, estacionamientos o entretenimiento, el hogar puede ser una fuente importante de ahorro para la familia en el uso adecuado servicios como luz, agua y gas.

La Procuraduría Federal del Consumidor, mejor conocida como la Profeco, recomendó que si va a comprar una casa, dependiendo el estado de la República, hay que buscar una que tenga una orientación adecuada, de tal manera que en clima caluroso se tenga menor ganancia de calor al interior. En estas zonas, el techo debe estar aislado térmicamente, pues junto con las ventanas, es por donde se gana más calor.

La dependencia recomendó tener ventanas con vidrios térmicos o de doble cristal; éstos reducen el calor, y por ende, el acondicionador de aire será de menor capacidad y tanto la inversión inicial como el recibo de la luz se reducirán. Los interiores deben ser de colores claros para reflejar mejor la iluminación natural y evitar encender las lámparas para economizar en el consumo eléctrico, sobre todo si no se cuenta con focos ahorradores de energía los que no se deben encender, en lo posible, durante el día.

Si por el clima donde se encuentra la casa requiere contar con un acondicionador de aire, éste debe ser eficiente. Hay que verificar que tenga la norma de eficiencia energética. Televisiones, reproductores DVD, aparatos estereofónicos, radiograbadoras, computadoras, entre otros, deben ser desconectadas si no se usan a diario, pues aunque estén apagados siguen consumiendo energía. Desconectarlos también los previene de posibles descargas que les causen daños severos.

Aguas con las fugas

Es importante considerar calentadores de agua solares que, a través de rejillas, absorben la energía solar y la emplean de manera eficaz. Esta es una buena opción para disminuir gastos innecesarios, aunados a la reparación de fugas de agua. En cuanto al lavabo no deje correr el agua. Hay que llenarlo y colocar un tapón, pero no hay que dejar el agua corriendo mientras sale caliente. Se sugiere cerrar el tapón y empezar con el agua que primero sale fría, al salir caliente se templará.

También es importante cerrar la llave del agua mientras se cepilla los dientes, de esta manera, una familia de cinco personas puede ahorrar hasta 40 litros diarios y los caballeros tendrán que enjuagar y limpiar su navaja de afeitar en un vaso. Otro de los sitios donde se pierde mucha agua y como resultado de ello, se desembolsa más en el pago del servicio, es el excusado. Es necesario comprar los de bajo consumo que emplean seis litros por descarga contra los tradicionales de 16 litros.

La Profeco recomendó baños breves sin emplear más agua de la necesaria, para eso existen reductores o economizadores de flujo para regaderas, llaves diseñadas para bajar el consumo, mezcladoras para cocina, herrajes para excusados o aditamentos para tuberías. No hay que usar más de 10 litros por minuto.

Un gasto menos

El consumo de gas es igual de importante que la luz y el agua y también significa un desembolso mensual considerable si no se sabe administrar de la mejor manera en estufas, calentadores de agua o el propio suministro del combustible. En el momento de preparar los alimentos, hay que revisar que los pilotos cumplan con su función y no existan fugas. Al terminar de cocinar hay que cerrar la llave de paso que suministra a la estufa, pues de lo contrario la flama de los pilotos consumirá el gas durante todo el día.


Lo mismo se debe hacer con el calentador de agua, si emplea uno automático evite abrir la llave de la caliente para que no se active, de lo contrario úselo lo necesario y manténgalo en estado de piloto. Si cuenta con tanque estacionario trate de cargarlo al medio día, ya que si lo hace por la mañana será menor su rendimiento. Si aún emplea los tradicionales tanques de gas cilíndricos elija entre los repartidores que pasan por su casa o investigue en la Profeco cuáles son las más confiables, pues no es raro que vendan uno de 20 kilos con menor contenido.


De esta forma, se alargará el tiempo de uso y recarga dejando en su cartera unos cuantos billetes más. Hay que llevar un registro de los gastos mensuales y si lleva una cuenta comparativa del antes y después de seguir estos consejos, podrá darse cuenta del ahorro que lograr.



Fuente: eluniversal.com

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